Eva Bernat |
Día
27 de Agosto de 2016, 5 de la mañana. Por delante 78 kilómetros y 6.800 m. de desnivel
positivo. Tras los preparativos de rigor, vestimenta y mochila, los 139
corredores-montañeros, de los 150 que se inscribieron, salimos de la plaza de
Sallent de Gallego dispuestos a dar una vueltecita por el Valle de Tena. En
ningún momento de la mano, si no como se suele decir, sin acritud, m… el
último. Como siempre en este tipo de carreras, los primeros vuelan y los
últimos planean. Planean como acabarla.
El
primer sector que va de Sallent a Panticosa lo hacemos de noche. Siempre es
espectacular ver “la serpiente” de luz subiendo por las fuertes rampas que
llevan al mirador de Sierra Plana. Desde aquí las luces de los pueblos del
Valle incitan a parar y relajarse, pero no es el caso. Preciosa y calurosa
noche, y encima con esas vistas nocturnas que quitan el hipo, para que seguir.
Hemos salido de Sallent por la carretera
para calentar y dispersar a los corredores, pero en el Km. 2, ya nos
adentramos en la montaña. Y para aperitivo un subidón que quita el hipo, y esto
es lo más suave de todo lo que nos espera. La bajada a Panticosa por el Hayedo
es preciosa y suave, muchas zetas. Como
este sector ya no tendremos otro. En este primer avituallamiento de Panticosa,
paramos pocos, veo que el personal pasa de largo. Yo a lo mío.
Los
sectores dos, tres y cuatro nos llevan de Panticosa pueblo al Balneario del
mismo nombre. Una primera parte bastante corredora por senda boscosa y de
pastos, donde algún corredor se despista. Tras la pista de la Ripera comienza la subida
al Ibón de Catieras, zona preciosa y poco visitada, aquí la carrera ya está
estirada, y comienza cada uno a estar en su sitio. Hasta aquí prácticamente no
hemos visto el granito. Nos habían contado que lo tocaríamos algo. Desde el
collado de Catieras, ya vemos el Garmo Negro, que vistas de todo el macizo,
antes hemos apreciado, Telera, Tendeñera, y demás, mucho demás, que no es el
caso de citar.
Desde
aquí alguno le hace pensar, ¿misión imposible?. A partir del collado de
Catieras, entramos en un mundo granítico que no soltaríamos hasta Tebarray.
Esta zona de Catieras a Brazatos es una de las
menos transitadas del Pirineo, si
te pierdes por aquí no te encontrarán. “Preciosas” y duras bajadas, poco llaneo
y muy duros repechos para pasar los collados hacía Brazatos. Aquí el ritmo ya
se ralentiza. Desde el collado Bajo de Brazatos un fuerte descenso nos lleva a
la Cabaña del mismo nombre. Entramos de lleno en la zona de influencia del
Balneario de Panticosa, y por lo tanto mucho excursionista que nos dan ánimos.
Se agradecen, hemos pasado de la soledad a la compañía. Ya no nos abandonará
hasta La Sarra. Seguimos
por la GR11 hasta los Ibones de Brazatos, bajos y altos, pasamos por un fuerte
collado hasta los Ibones de Lavaza, y una preciosa bajada llena de zetas nos
deja en el Refugio de la Casa
de Piedra… y madera. Mi ritmo en subida es “cochinero”, pero todo lo que pierdo
en subida, lo gano en las bajadas. Así será la tónica general. Alguno ya se me
mira con mala cara… “es broma”.
Sectores
cinco y seis, zona entre refugios de alta montaña, Casa de Piedra, Bachimaña y
Respumoso, ahora Respomuso.
Fotos: Rafa Cored |
Tras
veinticinco minutos en la Casa
de Piedra, partimos hacia lo mas alto de la carrera, el Garmo Negro (3064 m). Pico
rápido de subir donde los haya, sencillo de subida, y técnico de bajada. Pero
en la cima la gente para poco. Más tontos. Yo que he subido mucho me paro a ver
el paisaje. Me siento y me como un par de minibocadillos de carne de membrillo
¡Qué vistas a los infiernos! Si eso es el infierno, allí quiero ir yo. La
bajada de Garmo-Negro es muy técnica, por lo que algún corredor tiene
dificultades.
Enseguida
se llega a los Ibones de Arnales y de aquí por un terreno poco transitado hacia
el nuevo refugio de Bachimaña. Otra sentada más corta y para arriba. Llevamos
un rato que nos vemos los mismos 6 o 7, ahora yo delante, ahora tú. Alguna
pequeña charrada, y “pa lante”. Preciosos los ibones Azules, y la cara norte de
los Infiernos, con su glaciar, o lo poquito que queda. Hay que mirarlo y
observarlo, da tiempo para todo. La subida al collado de Tebarray es “corrible”,
pues la corro. La trepada final, castiga, pero más castiga la bajada, muy
técnica, equipada con cuerda fija, a algunos les sale fuego en las manos de
tanto agarrarse. Aquí me sujeto dos metros y me voy rápidamente y sin parar
nada hasta el Refugio de Respomuso. Casi todo corriendo. Aquí paro y se me para
el Garmin. Cuando lo descargue me dirá que hasta el inicio de subida del
Collado de Musales llevo 15 horas, 13 en movimiento. Casi no me puedo creer que
haya parado dos horas. He parado en todos los sitios, ¿pero tanto?, lo del
Balneario sí, ¿pero el resto?.
Ya
solo quedan los sectores siete y ocho (Respumoso-La Sarra-Sallent). Ya dejamos
el granito. La zona de Musales a La
Sarra, es muy transitada por lo que hay muy buena senda,
tanto para subir como para bajar, buenas zetas, lo permiten relajar las
piernas. La bajada hasta la
Sarra, la hago despacio, casi relajando, pues pienso que
estoy en mi sitio, casi nadie me adelantará y a casi nadie adelantaré. Desde el
Ibonziecho ha empezado a anochecer por lo que enseguida tocará ponerse el
frontal.
En
la Sarra me
siento a comer un sándwich, caldo, membrillo y coca-cola, que ha sido la tónica
general, pero llegan unos cuantos. Por lo que pienso “a ver si no me adelantan”.
Salgo corriendo toda la pista, y enseguida llego al repecho final de la Ultra-Carrera por
Montaña, pero vaya repecho, 700
metros sin zetas, lo han marcado “to tieso”. Que conste
que a mí me va bien, a paso lento, hasta arriba. Me voy mirando para abajo,
pero no veo que los frontales no se acercan. Pues ya está, arriba en el collado
de Peña Foratata, respiro, y ya con tranquilidad hasta la meta. Todo bajada.
Alegría por haber finalizado. Buen tiempo. Y no demasiado cansado. 19 horicas.
Me
tomo una cañita, a la ducha y a dormir.
Son las doce y todavía hay gente aplaudiendo.
Como
soy de Huesca, he echado en falta en la línea de meta, el melocotón con vino.
Eso sube el ánimo.
Enhorabuena
a los voluntarios, organizadores y demás. Muy bien marcada la carrera, buenos
avituallamientos. Si alguno se queja, que lleve encima lo que quiera.
Jonatan Cuesta |
Según
he oído una de las carreras por montaña más técnicas y bonitas. Yo no doy mi
opinión porque me gustan muchas. Pero la verdad, tiene de todo y es muy bonita.
Pero sobre todo “muy buena gente en la organización”.
JAVISA.
JAVISA.
UN POCO DE ESTADISTICAS:
8K
INSCRITOS: 150 HOMBRES MUJERES
SALIERON: 129
(86 %) 120 9 TERMINARON: 85 (65,90 %) 77 (64,16 %) 8 (89,89 %)
4K
INSCRITOS: 312 HOMBRES MUJERES
SALIERON: 270
(86,53%) 246 24INSCRITOS: 312 HOMBRES MUJERES
TERMINARON: 242 (89,63 %) 224 (91,06) 18 (75,00 %)
VIDEO RAFA CORED
1 comentario:
muy bonita la crónica, Grande Javisa incombustible como siempre...... sigue así campeón
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