domingo, 29 de agosto de 2010

GRAND RAID DES PYRÉNÉES

Todos los adjetivos que podamos escribir de esta ultra EL GRAN RAID DES PYRÉNÉES, van a ser positivos.

Una fantástica organización, buen marcaje, fenomenales avituallamientos, seguimiento perfecto de la carrera, gran ambiente en todo momento en la línea de meta, con unos spikers “que no callan ni debajo del agua” y una persona allí mismo, en la oficina de turismo atendiendo continuamente las consultas sobre el paso de los corredores en los diferentes corredores. Y sonrisas, siempre sonrisas. Todo esto rematado por un recorrido ESPECTACULAR. David me comenta, que en algunos tramos le recuerda a Carros de Foc. Este año la carrera se completaba con la ascensión al Midi de Bigorre, pico de 2872 m de altitud.

La participación ya empieza a ser importante, con más de 700 corredores en la Ultra Trail y casi 700 en la versión corta o Grand Raid, doblando en esta última la participación del pasado año. Y ojo a este Grand Raid, que con 80 km y más de 5000 m positivos es una genial alternativa para los que se conforman con estas distancias.

Por otra parte el tiempo también fue un gran aliado este año, aunque teniendo que “sufrir” algún tramo con niebla muy cerrada, en especial por el Col del Portet, pero salvo los primeros que van como motos, nada que no se pueda solucionar con un buen reagrupamiento.

Y emocionante estuvo el seguimiento de la Ultra, con 3 corredores en cabeza que se iban turnando. El francés Bruno Bareilles llegó a tener más de media hora de ventaja sobre el segundo bien avanzada la carrera, pero ya en Tournaboup (km 131), el portugués Carlos Sá pasó a escasos 10 m. y lo alcanzo en el durísimo ascenso al Col de Baregès, en la Cabana de la Pègue, optando el francés, totalmente “petado” por quedarse a dormir allí. Carlos Sá pasó por el último control, el Restaurante Merlans, en el km 147, con 50 minutos de diferencia sobre Oscar Pérez, pero el portugués iba ya muy deteriorado y Oscar muy fuerte. Así llegó a meta con unos escasos 20 minutos sobre Oscar. Le faltaron kilómetros al corredor del Team Altecsport y de Peña Guara, que llego a meta muy entero, en cambio el portugués era un verdadero poema.

Por poner un par de peros, quizás la hora de salida sea algo más complicado, pero que lleguen a meta los primeros corredores entre las 3 (hora prevista) y las 7 de la mañana no lo veo yo muy claro.

Y por otra parte muy triste la participación española, con escasos 15 o 20 corredores (si llegaban) entre los 1400 participantes en ambas pruebas y eso que St. Lary esta a media hora de España. Pero este año todos habían optado masivamente por el UTMB, pero eso…ya es otra historia.


CLASIFICACIONES

FOTOS.

FOTOS DE CHUSTA.

FOTOS DE COMEKILOMETROS.

RELATO DE DAVID DEL GRAND TRAIL



6 comentarios:

Anónimo dijo...

Verás como el año que viene sube como la espuma la participación aragonesa...

Monrasin dijo...

Que aumentará la Española no lo dudo, pero la Aragonesa....no se yo...Ojala!
Pero...falta mucho, falta mucho...

Anónimo dijo...

El año que viene tú y yo corremos Monrasin.
Martin

joanjo dijo...

Después del fiasco organizativo del UTMB'10 (a esto se le llama MORIR DE ÉXITO) creo que el año que viene el GRP i UTAndorra ganarán más adeptos si cabe...

Monrasin dijo...

Martin, pero tu...¿no ibas a la UTMB el próximo año? ¡En dos sitios a la vez no se puede estar!!
Yo creo que en realidad esto no le afectará para nada a la UTMB. Dentro de unos meses ya estará todo olvidado y los corredores desearan de nuevo ir alla. Los que no han estado nunca porque tienen que estar y los que han estado para resarcirse. La decisión de parar la carrera seguramente se aceptará por casí todos como acertada. Las formas seguro que no. Y lo de dejar correr solo a 1000, avisandoles a las 3 o las 4 de la mañana, cuando eran más de 3500 eso es totalmente impresentable. Pero el tiempo borra los malos recuerdos pronto y seguirá quedando que la UTMB es la mejor.

Camila dijo...

Me encanta poder hacer ejercicio y por eso cada mañana salgo a correr por mi barrio. Cuando me voy de vacaciones también corro por nuevos paisajes, aunque mi rutina favorita es salir a correr y finalizar almorzando en un restaurante japones