CARRERA POR MONTAÑA "VALLE DE PINETA"

Con DIEGO, padre de LA CARRERA VALLE DE PINETA, nos hemos dado una vuelta, eso si, sin apurar mucho, al circuito de esta bonita prueba que aunque contó con poca participación el pasado año en su estreno, los corredores salieron encantados del circuito que habían preparado desde Bielsa.

Y ciertamente que es bonito. Un sendero encantador que se inicia en el mismo Bielsa, nos eleva hasta tener unas vistas aéreas de Bielsa que nos van motivando en este inicio de circuito, hasta llegar al embalse de Pineta.

Una vez cruzado el embalse y tras un ligerísimo paso por la carretera en dirección a Javierre, iniciamos el verdadero ascenso. Un ascenso vertical, técnico, con muchos tramos donde el sendero se imagina y con una trepada con cuerda fija impresionante, donde una vez efectuada, seria bonito parar un momentillo y volver la vista hacia el valle. Grandioso. En este tramo salvaremos 800 m en escasamente 3 km, pero con un “descanso” intermedio en los llanos de Diera. Preciosos campos de hierba, que en este caso nos llegaba hasta la rodilla, dificultando mucho su paso, pero que para la carrera estarán debidamente “afeitados”. Pasados estos llanos toca de nuevo apretar los riñones y seguir ascendiendo hasta coronar, en el km 8,5 el Pico Cuezo (2049 m), desde el cual se puede disfrutar de unas vistas magnificas, tanto de todo el valle a nuestros pies, con Chisagües que casi se puede tocar y la pista que sube hacia La Munia aquí mismo, pero 1000 m. más abajo. Robiñera, La Munia, Monte Perdido, las 3 Marias…hasta llegar al Portillo de Tella nos rodean, premiándonos con un escenario mágico. Aunque en esta ocasión no fue tan mágico, puesto que casí todas las cumbres estaban cubiertas de nubes y una amenazante cortina de agua hizo que Monte Perdido escasamente pudiéramos adivinarlo, como también adivinamos que en breves minutos nos iba a caer encima una buena tormenta pirenaica.

El descenso, largo, con tramos boscosos técnicos y con algún tramo de pista nos llevará hasta la localidad de Espierba, donde una incomoda pista de ascenso nos llevará en un par de kilómetros y 200 m. positivos, hasta los bucólicos llanos de Diera, para allí retomar el camino de ascenso en este caso con un descenso vertiginoso durante un breve tramo, para luego alejarnos un poco en un tramo rompepiernas, rematado con otro duro descenso que nos dejará justo detrás del albergue Jodi Turull, antiguo hospital de tuberculosos tras su construcción y posteriormente utilizado también como hospital de guerra a partir de 1938, siendo de nuevo abandonado tras la Guerra Civil hasta que en 1964 Jordi Turull, un joven padre escolapio aficionado al montañismo perdió la vida mientras ascendía al Monte Perdido por su Cara Norte. Cuando sus compañeros fueron a recoger el cuerpo descubrieron el antiguo hospital que para entonces estaba prácticamente arruinado, e impresionados por el bellísimo entorno del valle de Pineta, decidieron comprarlo, rehabilitarlo y convertirlo en casa de colonias. En la actualidad, el edificio, totalmente reformado, cumple la doble función de colonias de jóvenes durante el mes de julio, y albergue el resto del año entre Semana Santa y el 12 de octubre.

Desde allí tenemos 800 m. de carretera has llegar de nuevo a la Presa de Pineta, donde de nuevo podremos disfrutar del bonito sendero por el que hemos ascendido, cambiando el final por un impresionante sendero vertical que nos dejara en el mismo Bielsa, final de carrera.

Mi garmin me marcó 26 km y casí 1800 m. positivos.

FOTOS.