lunes, 30 de junio de 2008

CARRERA PEÑA MONTAÑESA

Al final fuimos 102 los atletas que tomamos la salida en la prueba disputada este domingo en Ainsa.
A las 9,30 de la mañana se dio la
salida desde el Monasterio de S. Vitorian (1100 m.), situado en la misma falda de la Peña Montañesa. Después de unos escasos 500 m por asfalto se atacaba directamente la cara sur para, después de más de 1200 m. de ascenso llegar a la cima de la Peña (2.291 m.). Desde allí una zona bastante técnica en descenso para llegar para rápidamente acceder a la canal de la cara norte, donde nos esperaba la famosa pedrera. El inicio se encuentra bastante liso, con lo que debido a su verticalidad la convierte en una zona bastante complicada. Un poco más abajo la pedrera puede hacer las delicias de los amantes de esas zonas, que somos muchos. Posteriormente se accede al bosque, lugar donde es obligatorio limpiar las zapatillas de piedras y un pecado no hacerlo, los que no llevamos polainas. Una vez limpios, rápidamente se accede a la Collada y después de un poco de agua y medio kilómetro de pista entrar de lleno en el bosque que nos llevará en descenso y con algo de sombra hasta las inmediaciones de Torrelisa en el km. 16. En el momento que se accedía a la carretera el golpe psicológico era tremendo, unos metros por carretera con el pueblo al fondo y la seguridad de que los kilómetros que faltaban hasta Ainsa iban a ser un verdadero infierno debido al agobiante calor con que nos obsequio el domingo. Menos mal que la organización, perfecta en todos los aspectos, había dispuesto las correspondientes mangueras tanto en Torrelisa como en el Pueyo de Araguas que a mas de uno le “salvaron la vida”.
En resumen, una carrera ya de por si dura, pero que
se multiplico dicha dureza debido al calor, por otra parte esperado porque la fecha es la fecha.
Quizás la única crítica que se
pueda hacer a la organización sería la hora de salida, lo que repercutiría en un fuerte madrugón para todos, pues no en vano hay que contar con más de una hora para el acceso a la salida.
Los vencedores de la carrera fueron los franceses Didier Zago y Patrica Althape,
que para eso eran los favoritos, aunque hay que destacar el accidente sufrido por Juan Carlos Apilluelo, que tuvo que abandonar la prueba y necesito 10 puntos de sutura en el labio inferior. Espero que se recupere pronto.
Por otra parte impresionante la carrera de Samuel, terminando en el segundo puesto, parece que tantos kilómetros de bicicleta y la perdida de unos cuantos kilos con su dieta europea le han sentado fenomenal.
Anotar que la segunda clasificada, Teresa Forn, ex campeona del mundo y curtida en mil batallas confesaba que era la carrera en que más había sufrido.
Después de la entrega de premios, comida para todos los corredores, organización, voluntarios, guardia civil, etc, en el pabellón, a base de paella y longaniza, helado y café, para posteriormente proceder al sorteo de regalos. Sorteo de lo más generoso, puesto que más de la mitad de los corredores se fueron a casa con algún lote de productos de la tierra, fines de semana en casas de turismo rural por la zona, etc, todo ello con un magnífico ambiente de compañerismo y amistad.
Impresionante el cariño que pone la organización en esta prueba, con un trato familiar a todos los corredores y un ambiente difícil de olvidar. ¡ENHORABUENA!

Crónica Diario del Altoaragón

Alguna foto.

Fotos de Luigi

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Muchas gracias por fotos de todods los compañeros en la llegada, que con lo "jodidos" que ibamos todos somos capaces de sacar una sonrisa.
Una vez + gracias.
Fer.

Monrasin dijo...

pues si....llegamos todos un poquito petados. Yo pensaba en no volver a correr mas...pero.....¡ya he cambiado de opinión! El domingo más!

Anónimo dijo...

Sin quitarle merito a Samuel,hay que decir que tanto Didier como Toño tuvieron que parar entre los pinos, alguno incluso dos veces,siendole arrebatada la segunda plaza, así son las carreras.Pero hombre esas cosas se hacen antes!
Saludos a todos los de los pinos.

Anónimo dijo...

HAY QUE ECHAR ABONO PARA QUE CREZCAN LOS ARBOLES FUERTES Y SANOS Y ASI PODER DISFRUTAR DE LAS SOMBRAS.

Anónimo dijo...

Primero la güella a toa pastilla y después este mozo que se baja los pantalones en mis mismas narices

Se han vuelto locos

Anónimo dijo...

Dentro de la dureza de una carrera de montaña, el calor agobiante la hace mas dura. Pero pasa eso está el agua y la comida, para ir reponiendo fuerzas poco a poco. Lo inevitable, los accidentes en esta carrera fueron lo peor, sino que que lo digan a Apilluelo, Alberto (Bolea) y unos cuantos más. Y como siempre, en verano lo normal es que haga calor, y en invierno frío.
Hay que ser previsores y con la botellica en la mano, hacia adelante.
El domingo nos vemos en Madrid con el que venga.