Auque ya son varias las ocasiones
en que me he desplazado a la
Alta Ribagorça, de nuevo apatecía hacer una visita a estos
paisajes catalanes tan magníficos y que en diferentes tramos hasta se comparten
con Huesca.
Me llamaba la atención la Ultra Trail Comptesd’Erill, una prueba que prometía un paisaje pirenaico, pero no rocoso, mas bien
por bosques y palas herbosas y que visitaba pueblos no habitúales en las guías turísticas.
Por otra parte una buena ocasión
para participar también en la prueba corta, con salida a la misma hora que la
larga y con un kilometraje y desnivel muy asequible.
Así, a las 8 de la mañana del
sábado se dio la salida a los poco más de 100 corredores que tomaron la salida
en ambas pruebas, unos 70 para la ultra de 80 km y en torno a los 4800 metros positivos y
37 los que querían disfrutar de los 18 km y 1000 positivos que marcaba la prueba
corta. Todo esto con una temperatura de lo más agradable de 0 grados centígrados.
Unos 8 km comunes hasta el pequeño
pueblo de Irgo, los primeros 6 muy rápidos al margen del río Noguera de Tor,
entre pista y senda. A partir de Irgo la ultra se iba en busca de paisajes más
montañosos, pasando por Barruera, Taull y subiendo hacia la zona de la estación
de esquí de Boi-Taull, para atacar el pico Corronco (2534 m). Después una
larguísima bajada y así dejar para la tarde noche zonas más bajas como la
ermita de Sant Salvador, Peranera o la Viu de Llevata con su popular barranco.
Realmente el tiempo y el paisaje
fueron fabulosos, por lo que el éxito de la prueba se facilitaba mucho. A pesar
del fresco matinal, el sol apareció pronto y se pudo saborear un día realmente
ideal para disfrutar del monte. Repito, los paisajes de fábula.
No me pareció una prueba con
mucha logística, más bien sencilla, con poca participación pero con un ambiente
familiar realmente atractivo y por otra parte con unos voluntarios, como viene
siendo habitual, de una simpatía tremenda. Mención especial para las chicas de
S. Salvador. Quizá el único pero que les pondría sería en cuanto al marcaje por
las partes altas, zonas muy abiertas, sin senda fija y donde había que prestar
excesiva atención para encontrar la siguiente cinta. Quizá también habría que
pulir algún tramo de asfalto y pista.
La prueba fue dominada y ganada
por el gran favorito, Jaume Folguera, aunque quizá con algo menos de margen del
que se esperaba, puesto que Esteban Monje llegaría a escasos 10’ de Folguera. En chicas, la
primera parte sería dominada por Gisela Soley, aunque esta, con más problemas
en el descenso sería sobrepasada por el equipo que formaron Marta Rosell y Montserrat Coll, que con mucho más
ritmo en el descenso se presentarían en meta juntas y con una hora de margen
sobre Gisela.
En cuanto a la carrera corta también
dejo un muy agradable sabor de boca, pues a una primera parte excesivamente rápida
entre pista y poco desnivel, se le unía una segunda parte mucho más salvaje y técnica,
con vistas fantásticas y algún descenso para disfrutar de verdad.
Muy buen trabajo del Centre Excursionista de l’Alta Ribagorça(CEAR) organizador de esta bonita prueba.
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